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Construyó un Torbellino: Osmar Castillo subió a Angostura del penúltimo lugar hacia el campeonato

Nada fácil fue la “papa caliente” que a Osmar Castillo le tocó recibir a principios del mes de junio, cuando asumió el mandato de Angostura, un elenco organizado, con un buen plantel, pero que deambulaba por la zona baja del Grupo Centro-Oriental, al punto de solo tener un mejor rendimiento que Dynamo Puerto, a priori, la oncena con el desempeño más bajo de la temporada 2022 de la Liga FUTVE 2, pero qué, con esfuerzo, logró levantar al punto de ser campeón.

Diez puntos de 27 posibles y solo un gol de saldo positivo tenía ese conjunto, que estaba lejos de ser el “Torbellino Auriazul”. Pero, una vez el exdirigente de Academia Rey se sentó en el banquillo del estadio Ricardo Tulio Maya,la historia fue otra, pues sumó 17 unidades y alcanzó, in-extremis, la clasificación a los Cuadrangulares de Ascenso.

“Trabajamos bastante, la directiva se esfuerza mucho por el equipo, una labor ardua entre ellos y este cuerpo técnico, era afinar detalles, que ellos creyeran que podían y por ahí vinieron las cosas, son muchachos con muchos talento que lo demostraron”, expresó el estratega al concluir la vuelta de la Final, en la que batieron con global de 4-2 a Anzoátegui, incluyendo un 1-3 de visitante en el estadio José Antonio Anzoátegui de Puerto La Cruz.

“Nosotros trabajamos desde la jornada nueve, pensando en qué la mentalidad, las ganas de querer jugar, son chamos muy talentosos, con muchas capacidades y que no estaban siendo desarrollados, trabajamos con base en eso, a la parte física, Dios siempre nos ha acompañado para darle este triunfo a Ciudad Bolívar”, abundó al respecto el mandamás de los bolivarenses.

El resto fue historia, primeros clasificados a semifinales, en un grupo en el que solo Petare les hizo frente, y despacharon a Ureña y al campeón defensor, al que le tomaron el relevo, Titanes. Después, una exigente llave contra el subcampeón de la campaña pasada, Atlético La Cruz, que quedó 1-1 y se definió en penales en favor del cuadro fundado en 2007, con 13 calendarios en la categoría de plata del balompié criollo, para luego dar cuenta de los anzoatiguenses en la instancia decisiva.

Castillo se apoyó de su base

Él sabía cómo mejorar las cosas y para fraguar lo que finalmente se logró, apostó a la combinación de experiencia y juventud que armó la gerencia del Angostura, y que Castillo condujo al éxito.

“Tenemos un buen portero, que estuvo en Primera División como Héctor (Pérez); un central, (Luis) Parra, que también jugó Primera; (Anderson) Cardozo jugó primera, (Abraham) Moreno jugó Primera, Christian Gómez viene del fútbol extranjero, en categorías inferiores en Estados Unidos, teníamos una base importante y completamos con estos chamos, que con el ímpetu y el corazón, unas poquitas indicaciones porque lo demás es talento de ellos, logramos lo que tanto anhelamos”, dijo de sus hombres, los que también le permitieron por primera vez alzar una copa en la Liga FUTVE 2 como DT.

¿Y ahora qué sigue? Se espera que Castillo pueda planificar ya el 2023, en el que será tanto el debut de su club en Primera División, como el suyo propio al frente de una oncena. Solo falta firmar el papel que certifique ese deseo mutuo de directiva y timonel.

“Sí, ya conversamos, ahora falta finiquitar solamente. Esperemos con el favor de Dios dirigir en Primera División”, soltó un esperanzado Osmar Castillo. / Pablo Rondón – Comunicaciones Liga FUTVE

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