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Lucciano Reinoso, el comodín del Caracas en el frente de ataque

Hay futbolistas que juegan al fútbol y otros que entienden el juego. Lucciano Reinoso integra el segundo lote de jugadores, a sus 19 años. Delantero o mediapunta, pero también a las ordenes de Fernando Aristeguieta en donde lo necesite por su inteligencia, una capacidad que destacó en la rueda de prensa posterior al triunfo 3-1 ante Yaracuyanos. Parte de esa generación mundialista sub-17 en Indonesia, promete ser una las próximas grandes ventas del Caracas. Mientras tanto aporta su talento y, sobre todo, su lectura táctica al cuadro avileño.

“Estoy bastante contento de adaptarme poco a poco a los sistemas que usa el profesor (Aristeguieta). Cuando ha disputo de un 4-3-3, algunas veces me ha puesto de volante y me ha costado un poco al principio, pero paulatinamente entendí la demarcación y lo que me pedía el entrenador. Cuando jugamos un 4-2-3-1 podría hacer de ‘9’ o de 10’, que son posiciones que conozco mucho mejor”, expresó Reinoso, que sus características encajan en el cambio de paradigma que ha implementado el “Colorado”, en un elenco que se caracterizaba por las transiciones y ahora apuesta por una mayor elaboración.

El aragüeño reflexionó: “Desde que llegó ‘Fer’ al club me ha ayudado muchísimo en cuanto a la posición de ‘9’, ya que no es la mía de forma natural. Estoy muy contento de tener a alguien tan importante como lo fue él en su carrera. Me aconseja para estar preparado para un plano más internacional. Se trabaja el tema del peso y la masa muscular, que junto al cuerpo técnico y mi persona nos enfocamos en mejorar ese aspecto”.

¿Qué le piden con o sin balón? “Sinceramente eso varía mucho, porque depende del equipo que nos enfrentemos. Para cada rival hay una estrategia diferente. En referencia a las libertades que me da el profesor (Aristeguieta), a él le gusta mucho mis descensos al momento de buscar la pelota en la mitad de la cancha y me da confianza para jugar a gusto por esa zona”, declaró. En cuanto al halago de su entrenador en rueda de prensa indicó: “Muy contento por sus palabras. Me ha dado la confianza de jugar en posiciones que no son habituales para mí. Demuestra que me tiene confianza y yo me encargo de aprovecharlo. Ese entendimiento lo he trabajado a través del tiempo con muchos estrategas que he tenido en mi carrera y me han brindado mucho aprendizaje. También es un don que Dios me dio y debo explotarlo”.

Un atacante moderno

Foto: Miguel Vallenilla Liga FUTVE

“Me defino como un delantero muy dinámico, que le gusta tener mucho la pelota. De estar en el área y también poner a jugar a los demás. En la idea de juego del equipo aprovecho una de mis virtudes que es saber manejar el tema de las presiones en el campo rival. También le doy apoyo y salida a los mediocampistas para ter una salida más limpia”, analizó. Su asistencia a Michael Covea es una muestra de su capacidad de hacer lo que pide la jugada, en servicio del colectivo. De pequeño fue muy fan de Lionel Messi, pero con el artillero que se identificaba mucho por su estilo era Karim Benzema. Y es que el aragüeño también juega para los que saben de fútbol.

Su vínculo con el fútbol inició a los cinco años. Alternaba el cemento con la grama, pero llegada cierta edad no tuvo dudas en que se iba a decantar por fútbol campo. No hubo otra disciplina deportiva que captara su atención. Los primeros pasos fueron en Maracay y el salto de calidad lo dio con la creación del proyecto EDICA, donde pudo jugar Liga FUTVE Junior y recorrer el país, gracias a la alianza con Gran Valencia. Al desplegar su inteligencia táctica por las canchas de la nación, llamó la atención de varios elencos y le llovieron las propuestas. “Sin duda alguna elegí al más grande de Venezuela”, soltó sobre su mudanza al Caracas.

En su joven carrera puede poner en su LinkedIn que disputó un Mundial sub-17. “Fue una experiencia muy bonita y de mucho aprendizaje. Pude competir con los mejores jugadores del mundo en la categoría. Lo bonito fue representar un país entero. Son muchos factores que te ayudan a seguir creciendo como profesional y persona. Aprender de lo negativo, mejorar y reforzar lo positivo de vivir un momento así”, rememoró. De un primer semestre complicado también sacó lecciones. “En lo personal internalicé aprovechar cualquier oportunidad, desde salir como titular o solo jugar cinco minutos. Siempre entregar todo y no escatimar nada”, reveló.

Su norte a corto plazo es consolidarse como titular, ya sea de delantero o enganche, y ganar la estrella. “A mediano plazo deseo poder salir a un equipo en el extranjero, donde pueda seguir creciendo como persona y futbolista”, remató. Reinoso es una bendición para cualquier entrenador, porque su inteligencia táctica le permite moldearlo a diferentes esquemas de juego. Al ser el prototipo de delantero moderno, le va a permitir más pronto que tarde fluir con su talento en otras latitudes. / Luis Vilchez-Comunicaciones Liga FUTVE

 

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