Martínez Poch: No hemos cambiado demasiado la temática de los entrenos
Los nuevos procesos suelen llevar un tiempo de adaptación, más cuando se trata de un grupo que viene de un 2021 tan agridulce como el de Mineros de Guayana, el cual se reforzó puntualmente para tratar de mostrar una mejor cara que la del pasado campeonato, más con un estratega extranjero como el argentino Gabriel Martínez Poch, quien poco a poco ha introducido sus ideas y el grupo las asimila rápidamente.
A tal punto, que los negriazules han obtenido dos victorias en sus tres primeras salidas, las últimas al vencer al Portuguesa en Araure (0-2) y a Lara en Ciudad Bolívar, 1-0. Dos cotejos en los que además mantuvieron la valla en cero, hecho que siempre es bien valorado por los estrategas.
Todo, tras un inicio dubitativo, tras caer 1-3 contra Monagas en el estreno, en el CTE Cachamay de Ciudad Guayana. «No hemos cambiado demasiado la temática de los entrenos, nosotros seguimos trabajando la idea de juego desde el primer día, nos hemos hecho cargo del plantel el 10 de enero y lo primero que hicimos fue hacer hincapié en los principios que nosotros vamos a seleccionar, como siguiendo nuestras ideas para construir nuestro modelo y que, con el aporte de los jugadores, se convierta en nuestro estilo», nos comentó el dirigente al respecto.
Si bien es cierto que suma dos meses en su cargo, se trata de alguien que ya conoce estructuralmente al club bolivarense, porque trabajó en él hace tres temporadas, como mano derecha de un anterior timonel. «La confianza es un factor fundamental en el funcionamiento de cualquier equipo de cualquier parte del mundo y esa confianza Por más que se trabajen psicológicamente que se entrene y se vean resultados positivos. Día tras día la verdadera confianza se logra justamente en base al rendimiento y resultado”, destacó el mandamás.
Lo importante es no caer en solo los aspectos negativos sino tomar fuerza de los que le pueden servir en su gestión. “Considero que la mayoría de los técnicos le sucede la misma manera, por ahí no nos hemos preocupado en esos partidos, donde se gana o se saca un resultado positivo, pero no se encuentra el funcionamiento, cosa que no nos viene sucediendo afortunadamente a nosotros. Sentíamos una confianza interna muy grande, porque sacando los errores puntuales que nos privaron de los tres puntos, el primer partido vimos un funcionamiento acorde”.
Ese duelo pudo haber bajado las expectativas hacia el grupo y a Mineros en general, pero solamente se debió a circunstancias que sobrepasaron a Martínez Poch. “Fue un primer partido muy particular, donde justamente por el inconveniente que se dio que no pudimos hacer entrenamientos en el del Cachamay, ya que la prioridad es recuperarlo para que La Vinotinto haga las veces de local allí, entonces no tuvimos posibilidades de pisarlo y nos costó mucho adaptarnos a la superficie de nuestro estadio”, además de otros compromisos previos que impidieron una preparación adecuada, según el DT minerista.
Los soldados de Martínez Poch
El grupo que tiene a su mando el argentino es uno más maduro, luego de superar en muchos casos su primer año y medio al máximo nivel del país, la Liga FUTVE. A eso se le suma la llegada de importantes piezas, en la que destaca el retorno de Richard Blanco, así como otros elementos que suman a tener un plantel más adecuados a los deseos que tiene el cuerpo técnico.
“Estamos contentos, pero no conformes aún porque nosotros consideramos que el equipo está en los inicios y tiene mucho potencial por delante. Estamos contentos por lo rápido que se acoplaron los refuerzos y todo esto surgió a raíz de una gestión de equipo, que revisamos junto con mis colaboradores, dónde buscamos que se afiance el grupo, que sea humano y al partir de ese hecho, desde el grupo creamos un equipo sólido”, avisó Martínez Poch.
El hecho de estar compenetrados como escuadra, les permite a los jugadores compartir “la idea de juego y estamos cada vez más sólidos y comprometidos para ver a Mineros en lo más alto”. En ese sentido, también conseguir que esa idea se asimile en medio de un buen ambiente facilita las cosas.
“La verdad es que estamos satisfechos porque es un camino ascendente, donde paulatinamente iremos puliendo ciertos detalles, pero está muy claro que desde el primer día una aceptación hacia la propuesta inicial de quiénes están. A mí no me gusta comparar y tampoco podría hacerlo porque no estuve el año pasado, pero los comentarios que me llegan de diversos sectores fueron coincidentes en que el equipo se le ve con otro semblante, parándose mucho más firme frente al rival de turno y queriendo ser protagonista”, afirmó el sureño.
La mentalidad, queda más que clara. “Eso nos va a dar muchos dividendos de la parte futbolística y humana así que dedicamos mucho tiempo esas esos ítems y eso nos dará buenos resultados día tras día”.
En su siguiente salida, para tratar de continuar la racha de resultados positivos, frente a Carabobo en el estadio Misael Delgado de Valencia, tratarán además de extender esta forma de actuar. “Nuestro modelo de juego apunta a construir un equipo sólido, agresivo, protagonista y más allá de que sabemos que jugamos contra rivales de real jerarquía, que respetamos mucho, vamos a hacer lo posible por ir al campo que nos toque y dejaremos todo en la cancha con la intención de llevarnos los tres puntos”.
Dos caballos
En particular, dedicó palabras a quienes toman las riendas desde el terreno de juego en el funcionamiento de Mineros. El propio Blanco, como goleador y capitán del club, así como el máximo artíllero del pasado certamen, como el del actual hasta el momento, el trujillano Francisco Carabalí.
“Carabalí no necesita presentación Es un jugador determinante, en la medida que el siga creciendo va a seguir creciendo el equipo de una manera proporcional y lo mismo sucede con Richard Blanco, son jugadores que sienten la camiseta, que se esfuerzan y son ejemplos a seguir en el día a día. Ellos parecen juveniles en cuanto a la energía y la ilusión que proyectan”, remarcó.
Es la línea que quieren, que además sean los líderes de su novel equipo y le permitan hacer sentir esa confianza al proyecto que emprende. “Le sumamos su experiencia y su sentido pertenencia, nos hace realmente felices de poder contar con sus servicios y más de la manera que lo están haciendo hoy por hoy en Mineros de Guayana”, concluyó el entrenador de 57 años, quien tratará de completar una tarea que hace unos años, cuando estuvo como asistente técnico en el club bolivarense, dejó pendiente. / Pablo Alejandro Rondón – Comunicaciones Liga FUTVE
