
José Gregorio Pérez: Me tienen que matar para que deje de correr una pelota
Corre y anota. Corre y tapa una línea de pase. Corre y defiende un córner. Corre y no deja de correr. Su referente es Charlis Ortiz y lo sigue en TikTok. Su camino tuvo varias escalas antes de llegar a la Liga FUTVE Banco de Venezuela. Con el gol de su lado y el fútbol como norte, José Gregorio Pérez metió el pie en la puerta y nunca dejó que el sueño de ser profesional le diera un portazo. Es el máximo artillero y capitán de Yaracuyanos, quienes guió a su primer triunfo en esta edición de Copa Venezuela con un doblete ante Titanes. Los “Colosos del Sorte” confían en él para mostrar otro rostro en el Torneo Clausura.
“Estamos aprovechando al máximo la Copa Venezuela, nos sirve de preparación, para sumar y llegar con buen ritmo al Clausura (…) Necesitábamos mucho este resultado contra Titanes. Al ganar, el equipo toma mucha confianza y nos llenamos de victoria, así que nos cayó muy bien este triunfo”, expuso Pérez. Los de San Felipe son parte del grupo “C” y venían de caer contra Marítimo y Zamora. En ambos encuentros, el resultado se les escapó en la segunda parte. Mientras que en el Apertura culminaron últimos con ocho unidades.
Bajo la capa negativa de los malos resultados, el juego dice que Yaracuyanos tiene pulso. El electrocardiograma indica que su corazón tiene actividad. La fórmula para buscar la salvación no es de mínimos ni conservadora. Con Dayron Pérez, son un equipo atrevido. “Es un profesor al que le gusta ir hacia adelante, con o sin pelota. Le gusta mucho la presión alta. Quiere que el jugador sea aguerrido, que no abandonemos el juego, que siempre juguemos la pelota y vayamos al frente. Nos hemos preparado física y tácticamente”, soltó el ariete.
Un gol a la adversidad

Fotos: Prensa Yaracuyanos FC
La punta del iceberg son Academia Rey y Titanes: una carrera en la división de plata para llegar al máximo circuito. “Era una meta y un propósito personal llegar hasta aquí. Lo vivo al máximo, con mucha responsabilidad y agradecido con Dios. También le agradezco a mi familia, mi esposa y mis hijos, los que te apoyan en las buenas y en las malas. Es un orgullo el trabajo desempeñado y me lo propuse hace mucho. Hoy en día lo tengo y no pienso soltarlo”, confesó.
“¿Luego de cada gol en quién piensa?” “Primeramente en Dios y mi familia. El Señor es el que nos da la oportunidad y mi familia es la que ha estado a mi lado cuando he estado frustrado y no encuentro salida. Mis primeros recuerdos son ellos y nada más. No puedo perder el enfoque y debo seguir haciendo goles para darles alegrías”, reveló. Pero su carrera no solo es una típica historia de superación, con un carrusel de clubes hasta ascender a la Liga FUTVE Banco de Venezuela con Yaracuyanos; su camino no fue lineal.
Inició con San José a los cuatro años en su natal Lara. Luego hizo vida en Unión Lara con la sub-15 y la sub-17, también en unos nacionales. El punto de quiebre fue en el Deportivo Lara, pero nunca debutó. Luego de quedar seleccionado en la plantilla, le dijeron que no. “Desconozco qué sucedió, pero me sacaron luego que me dieron el sí”, rememoró. Tocó la puerta en Policía de Lara FC. “Iba a estrenarme en Copa Venezuela, pero no pude por la regla”, añadió. Tras tantos golpes, colgó las botas momentáneamente.
“Me alejé del fútbol tras situaciones de la vida y muchos desaciertos. Me desanimé y me dediqué al trabajo: a la albañilería y después a la fabricación de dulces de bocadillo de plátano. Siempre estuve pidiéndole a Dios que me brindara una segunda oportunidad”, aseveró. Un amigo del fútbol amateur lo recomendó para Academia Rey. “Me dijo: ‘Mano, activo, que el técnico te quiere ver el jueves’. Luego el día que me citaron me volvió a llamar y dijo: ‘Mano, te tienes que presentar hoy, porque te quieren ver’. Le dije a mis jefes el miércoles, pero me pusieron peros. Dejé mi trabajo y me fui con los ojos cerrados. Lo mío es el fútbol”, rememoró.
La historia tuvo final feliz. “Me probaron y quedé. Me metieron en un torneo tipo de tercera división con puros juveniles y chamos que iban para el equipo de segunda, donde fui el goleador. En seis partidos hice ocho goles. Así ha sido mi camino hasta ahora que estoy donde estoy. Siempre lo he dicho: la constancia, la perseverancia, el trabajo día a día es lo que te va a llevar a ser lo que tú quieras ser en la vida”, reflexionó.
Pérez es un cazador

Fotos: Prensa Yaracuyanos FC
“Siento que nací con la virtud de hacer goles. Un goleador siempre va amolando el cuchillo para ser más contundente a medida que uno hace su proceso. Desde pequeño siempre me ha gustado buscar el arco, incluso cuando jugué de lateral iba a cabecear y le pegaba a la portería”, soltó. En su etapa en San José fue central y lateral, pero en Unión Lara se volvió un cazador en el área rival. “Por mis virtudes y cualidades me colocaron de delantero y extremo por mi definición. Eso eran goles tras goles. Aparte, nunca doy una pelota por perdida”, anexó Pérez.
Pero no todo es instinto, hay un método. “Como delantero me gusta mucho leer al rival, identificar los espacios. Sé que si tengo un central que siempre va a pegarme, trato de alejarme un poco. Si veo que el espacio está por la banda, hablo con mis compañeros y me lanzo al costado. Sé que puedo hacer daño por mi viveza más que todo”, señaló. Otra de sus especialidades son los penales. “Les digo a los muchachos que cuando vayan a cobrar tienen que ir con toda seguridad. Aunque falles, siempre ve firme a lo tuyo. Me gusta sentir esa presión de los penales y pararme allí, aunque, siendo sincero, no los practico mucho. Estudio bastante a los porteros en ese momento. Se tiene que tener tranquilidad y respirar profundo. Decir ‘un palo’ e ir a ese, así te adivinen la intención. Eso me ha llevado a ser contundente”, explicó.
Su mejor socio en Yaracuyanos es Camilo Vargas. “Estuve con él en un torneo en Colombia. Me identifico siempre con él, porque juega como a mí me gusta. Sabe que cuando pico es porque hay un espacio donde me la puede lanzar”, dijo Pérez. Con mayor tiempo en la categoría de oro, le ha tomado la mano a la dinámica táctica y ha logrado hacer esa transición de segunda división a la Liga FUTVE Banco de Venezuela. “Veníamos acostumbrados a otro ritmo. Ahora todo es más táctico. Tienes que tener mucha paciencia, tratar de mover la pelota e identificar los espacios en el rival. Con las herramientas que nos ha dado el profesor Dayron Pérez, debemos aprovechar las oportunidades. Esto es un grupo muy joven, con capacidad y ganas de ir hacia adelante para mantener el equipo en primera”, aseveró.
Sobre la idea del cuerpo técnico expuso: “Tenemos un 80 por ciento asimilada la idea y cada vez interpretamos mejor los conceptos. Nunca desistimos de lo nuestro y lo que hemos trabajado. Lo seguimos intentando, perdamos o ganemos. Los juegos de Copa Venezuela te ayudan a mejorar ese modelo de juego del profesor (…) En la segunda división es más correr, lo físico, y los defensas van al bulto, sin ofender a nadie. En primera es más complicado encontrar grietas en la defensa, porque se preparan de forma táctica para cuidar el cero. La virtud del jugador está en la concentración para detectar rápido, durante los 90 minutos, dónde está el hueco y aprovecharlo”, expuso. En lo que va de Liga FUTVE Banco de Venezuela acumula cuatro dianas y en la Copa Venezuela tres más.
Valorar cada segundo

Fotos: Prensa Yaracuyanos FC
“Para mí fue una revancha, luego del tiempo que estuve en pausa. Dios me dio otra oportunidad. Me tienen que matar para que deje de correr una pelota. Incluso me han pisado el tobillo y me cuesta caminar, pero no salgo. Termino mi encuentro de pie, solo me arrodillo ante Dios en privado. Me tienen que sacar con los pies hacia adelante. Me corre fútbol por la sangre; así estemos perdiendo 10-0, no voy a dejar de correr una pelota ni bajar los brazos”, reconoció. Aparte, reveló que vive “una bonita experiencia” en San Felipe y el hincha de Yaracuyanos lo ha reconocido por su esfuerzo.
Se crio en Lara con Heiber Díaz y José Manuel Rey como sus referentes, pero hoy en día se refleja en Charlis Ortiz. “Me gusta cómo juega el ‘Tigre’, me identifico con él al ver que también va al choque. Me gustaría intercambiar camisetas con él. Incluso lo sigo en TikTok. Lo enfrenté y me agrada su forma de jugar”, reveló. De esa estirpe de delanteros que son obreros del gol, que se les reconoce por su capacidad de finalizar, pero también por esforzarse al máximo.
“Nos enfocamos en el Clausura para mantener la categoría. Estamos de últimos, pero la intención es meternos entre los ocho, salvarnos y meternos en una copa internacional. La Copa Venezuela nos sirve de preparación, pero también apuntamos a lo más alto. Me gustaría decir al cierre de año que fue una temporada fuerte, que nos costó nadar todos al mismo lado, que fue difícil darle vuelta a la situación, pero que nos metimos entre los ocho y peleamos. Me preparo día a día para eso”, concluyó Pérez. / Luis Vilchez